— He oído que vuestro pueblo fue el primero en padecer la terrible presencia del dragón.
— Mi corazón se alegra de saber que habéis abrazado la Fe en tan aciagos tiempos en busca de consuelo.
— Me temo que la humanidad no podrá librarse jamás de la sombra de la sierpe. Pero aún queda luz en este mundo, una luz que nos guiará en los desafíos que nos aguardan.
— Mientras llevemos al Creador en nuestros corazones y en nuestros pensamientos, brillará el rayo de la esperanza.
(Una sola vez) — Tú recorres el mundo cómo[1] Arisen, ¿no es así?
— Su ilustrísima, el duque Edmun Dragonsbane, hizo lo mismo una vez.
— Su ilustrísima afirma que fue el mismo Creador quien le guió a derrotar al dragón en su juventud. Incluso hoy, no hay día que él no venga a ofrecer sus plegarias de agradecimiento[2].
— Harías bien en seguir los pasos de su ilustrísima, joven Arisen. Que la luz del Creador te ilumine.
Durante El altar del Dios del agua:
— Bien hallado(a) seáis, Arisen. Contar con vuestra asistencia en nuestroas misiones es una ayuda esperanzadora. No os retendré por mucho tiempo, pues el grupo de investigación ya ha partido de Gran Soren. Se dirige hacia el sur, a las ruinas que hay en las cataratas, cerca del campamento. Desconozco los peligros que pueden acehcar allí, pero estaré más tranquilo sabiendo que les acompañaréis. Os lo ruego, corred a su encuentro y protegedlos. Que el Creador os conceda premura, ser.
— El equipo de investigación se dirige hacia las cataratas que hay junto al campamento. Os lo ruego, id y mantenedlos a salvo, ser.
Después de conocer el destino de Jean:
— La función de la Fe es servir de asidero para los corazones de los hombres en tiempos difíciles. Para ello, debemos mantener la calma ante las dificultades y ser rápidos y eficientes en nuestras acciones. Ese es el motivo por el que, por encima de todo, debemos obtener conocimientos. Sería un grave pecado dejar que las costumbres o las emociones nos impidan aprovechar la oportunidad de adquirir conocimientos nuevos. Y, de esa forma, en la implacable búsqueda de la sabiduría, debemos aceptar que sufriremos bajas...
— Me entristeció sobremanera la noticia del fallecimiento del hermano Jean. Pero me consuela saber que al menos murió al servicio del Creador. Como él siempre quiso. Que la bendición del Creador esté con vos y con su ilustrísima, el duque Edmun.
— Es costumbre que las puertas de toda iglesia estén abiertas para los Arisen. Que la Fe os asista en vuestro viaje, hijo(a) mío(a).
— Los Arisen son de gran valor para la Iglesia. Albergáis el potencial de la victoria del ser humano sobre el malvado dragón.
— Es un deber y un honor vivir como Arisen. Como es también un deber y un honor para la Fe el guiar a los Arisen en su camino.
— No hay duda de que es necesaria una guía, aunque en vuestro caso disponéis de honradez de sobra. Algunos Arisen carecen de vuestros delicados modales y de vuestra devoción.
Durante Talento floreciente:
— Está practicando la bendición de flores, ¿no? ¡En ese caso, posee un don de la sanación! Es maravilloso. Me gustaría ver el producto de su trabajo. Una mirada de una flor así es suficiente para valorar el poder de aquel que la ha bendecido.
(Dar) — ¿Entonces, es de Quina? ¡Maravilloso! Al parecer, tiene un gran don. Puede que la madre superiora no tarde mucho en escribir al continente en nombre de Quina... Me alegro solo de pensarlo. Fue la mano del Creador la que la guió hasta nuestra iglesia, estoy convencido de ello.
— ¿Mm? ¿No sabéis lo de Quina, hijo(a) mío(a)? Se ha marchado a la abadía que hay al oeste.
— Me sentí casi obligado a ayudarla en su misión, tal era su diligencia y su pasión. Así que hablé con la hermana Hilde y le pedí que Quina tuviera acceso a la abadía.
— La madre superiora que está allí sirvió antaño en la Gran Catedral. Pensé que quizás ella sería capaz de ayudar a Quina a llegar al continente.
— Una mujer con la determinación de Quina tendrá éxito en la abadía, estoy completamente seguro. Con un poco de suerte, podría ser el siguiente paso en su camino hacia la Gran Catedral.
Después del juicio, a su favor:
— La absolución de Fournival nos ha ahorrado un innecesario derramamiento de sangre.
↑Aunque Geffrey es un político y puede estar solapando una mentira, este testimonio no puede confirmarse puesto que nunca se ve al Duque salir de su residencia y visitar la catedral.